Si el swingliving tuviera una Biblia, este sería el primer mandamiento para lograr que tu pareja se vuelva swinger.
Es fundamental que tu pareja se sienta amada, adorada y apreciada por ti, de lo contrario no estará dispuesta a tomar ningún riesgo que la haga o lo haga sentir sexualmente vulnerable, como volverse swinger, ir a una fiesta swinger, una playa nudista o cualquier otro comportamiento sexual diferente al que está acostumbrada/o.
Después de llevar un tiempo juntos es normal para algunas parejas caer en una dinámica rutinaria, sobre todo cuando las ocupaciones del trabajo, los hijos y la casa acaparan sus horas del día. Si este es su caso, es probable que ya no hagan cosas que hacían cuando eran novios, como tener detalles románticos y salir juntos de paseo.
La clave aquí es revivir el romance que los llevó a estar juntos, para mantener una relación más espontánea, apasionada íntima.
Tengan cuidado de no confundir romance con sexo porque son dos cosas distintas, sobre todo para las mujeres. Los hombres suelen asociar el romance con sexo, sin embargo el romance tiene que ver con amor, cariño y ternura… y a veces con sexo.
Ser romántico es sencillo y no requiere mucha inversión, lo único que se necesita es poner atención en la pareja para identificar las cosas que la hacen sentir amada. Muchas veces esos pequeños detalles incluso la incitan al sexo, por ejemplo:
1. Reír juntos al ver un programa o una película
2. Que su pareja le cocine y lave los trastes
3. Sorprenderla con un regalo sencillo pero sentimental
4. Dejarle una notita en el espejo
Como la lista de detalles románticos es larga, dedicaremos un próximo post exclusivamente para este tema. Estos detalles no sólo prepararán el terreno para hacer sentir a tu pareja que está en una relación sólida y estable, el principal resultado será que se enamorará más de ti.
Recuerda que estamos explorando las tareas del área 1 a realizar por la pareja interesada en hacer que su pareja se vuelva swinger.