Para ese pequeño porcentaje de mujeres que NUNCA ha tenido un orgasmo y para el resto que a veces sí, a veces no, para todas, hay una buena noticia de los expertos en sexualidad: se puede aprender a ser orgásmica.
El orgasmo es un momento de intenso placer que involucra activamente tanto al cuerpo como al cerebro. Ambos elementos deben estar sintonizados, por eso muchas veces no sólo la estimulación del clítoris, ni la penetración o el sexo oral son suficientes. El trabajo a realizar para alcanzar el orgasmo es tanto mental como físico, en el caso de la mujer.
Preparando el terreno mental
Para garantizar un espacio de pensamiento ad hoc para el orgasmo, los expertos recomiendan:
– Relajarse. A veces las mujeres nos enfocamos demasiado en alcanzar el orgasmo que no disfrutamos el momento. Lo mejor es tomarlo con calma y esperar lo mejor.
– Comunicarse. Los hombres no pueden leernos la mente, cada mujer es diferente y la forma masculina de excitarse y llegar al clímax es también muy diferente de la femenina. Para los hombres es suficiente la estimulación física del pene para llegar a eyacular, en cambio para muchas mujeres hace falta estimular más que una sola parte del cuerpo. Lo mejor es decirles cómo, dónde y por cuánto tiempo. Si piensas que estás siendo mandona o egoísta, mejor piensa que le estás dando la oportunidad a tu pareja para que sepa cómo complacerte efectivamente.
– Disfrutar. Darse permiso de disfrutar el placer sexual no significa que eres una mala mujer o egoísta, sino todo lo contrario.
– Fantasear. Algunas mujeres tienen dificultad para concentrarse durante el sexo, si ese es tu caso tal vez quieras ocupar tu mente con fantasías que te ayuden a excitarte y a alcanzar el orgasmo.
Preparando el terreno físico
Si bien relajarse mentalmente es imprescindible, relajar el cuerpo no lo es, sobre todo si no quieres parecer muñeca de trapo en manos de tu pareja. Mientras que la mente debe estar relajada, en tu cuerpo debe haber cierta tensión, según los expertos:
– Tensión del abdomen, glúteos y piernas. La tensión de estos músculos es fundamental para alcanzar el orgasmo, ¿por qué? Porque al contraer o tensar ciertos músculos se incrementa el flujo sanguíneo por todo el cuerpo y sobre todo en el área genital, eso produce excitación y entre más excitada una mujer mayor probabilidades hay de orgasmo.
- Tensión de los músculos de la pelvis. También conocidos como ejercicios Kegel, este el mismo tipo de tensión que se presenta cuando se intenta detener el flujo la orina. Puedes tensar este grupo de músculos cuando sientas que estás cerca del orgasmo para alcanzarlo efectivamente.
¿Los vibradores sirven para alcanzar orgasmos?
Usualmente estos aparatos brindar una estimulación más intensa que la obtenida al tener relaciones sexuales, o por estimulación manual u oral. Los expertos consideran que pueden ser de mucha utilidad para alcanzar el orgasmo si se sufre de alguna enfermedad que hace difícil alcanzar el climax, como la esclerosis múltiple. Y pueden usarse tanto si la mujer está sola como acompañada.
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