Con Internet y los medios de comunicación digitales a nuestra entera disposición, las personas además de ventajas hemos adquirido principalmente responsabilidades y obligaciones.
Aunque es muy fácil conectar un dispositivo a Internet y comenzar a navegar en la Web (al menos en los países donde los gobiernos sí lo permiten a sus ciudadanos), el reto consiste en hacerlo responsablemente.
¿Por qué es un reto?
Es un reto a vencer porque hay tres paradojas básicamente a las que los usuarios de Internet nos enfrentamos, según el estudio global denominado Privacy Index, realizado por la empresa EMC Corporation y el cual evalúa las actitudes de los consumidores con relación a la privacidad online.
Las paradojas en las que caemos los usuarios según este estudio son las siguientes, y las hemos retomado en este post porque aplican a cualquier persona, incluidas las personas swinger:
1. Los usuarios quieren compartir en redes sociales sin riesgos
Compartir fotos, datos de contacto y otros materiales en redes sociales abiertas sin riesgos es un oxímoron, tanto como lo es un “instante eterno”.
Es imposible tanto para una persona swinger como para una persona no swinger compartir información de manera on-line y pública sin riesgos. Compartir en redes sociales implica perder el control de eso que se comparte, por eso la lógica no existe en compartir sin riesgos, sino en compartir lo compartible.
2. Los usuarios delegan a las empresas la responsabilidad de garantizar su privacidad
La mayoría de las personas considera que la responsabilidad de su privacidad radica en las empresas que les ofrecen el servicio de red social, porque esas entidades son las que “manejan la información”.
Sin embargo en todas las Condiciones y Términos de Uso de la mayoría de los servicios de este tipo: a) los usuarios aceptan apegarse a esas Condiciones y Términos de Uso con el sólo de hecho de registrarse y b) en la mayoría de las cláusulas, la responsabilidad de privacidad recae en los usuarios mismos.
3. Los usuarios comparten contenidos inadecuados
A cualquier persona, una red social general no le sirve para compartir lo que sea propiedad intelectual, que sea información personal, su ubicación física, ni mucho menos cuentas bancarias, ni cualquier otro material que pueda luego ser usado en su contra.
A los swingers una red social general además de lo anterior, no les sirve porque no está permitido publicar contenidos de corte pornográfico, ni desnudez alguna, sea gráfica o textual, por ejemplo fotos o comentarios. Tampoco deberían usar una red social general porque hay menores de 18 años a los que indirectamente podrían estar corrompiendo. Tanto en Twitter como en Facebook la edad mínima para poder registrarse es 13 años. y se sabe que en todo el mundo hay niños menores de 13 años registrados en ambos servicios. Tan sólo en Facebook y durante 2010 había 7.5 millones menores de 13 años usando Facebook.
Responsabilidad digital implica leer las letras chiquitas
La responsabilidad digital en resumen es un reto porque requiere que los usuarios sean conscientes del uso que dan al servicio, que lean y se apeguen a los términos de uso y condiciones del servicio que están usando y que tomen decisiones adultas sobre lo que publican, comentan y comparten.
Si estás usando una red social general para tu actvidad swinger, te recomendamos no hacerlo y usar una red especializada. Al ser un servicio que requiere de condiciones de privacidad especial tiene costo. La buena noticia es que hay redes sociales especializadas en el mundo swinger para todos los presupuestos y expectativas.
Recuerden que si tienen comentarios o inquietudes respecto del alguno de los temas que hemos tratado o tienen sugerencias sobre lo que iremos abordando aquí en www.guiaswinger.com, pueden escribirme a ana@swingliving.com o info@swingliving.com. O dejar su comentario en este post. De cualquier forma, su comunicación será bien recibida, gracias.